Lic. Gerardo E. Herrera Alba.
A la no pregunta…
Tal día como hoy, de otro tiempo pasado de mi gran imaginación, se me fue cuestionado para que diera mi opinión y punto de vista o más bien mi punto de vista acompañado de mi conclusión a manera de opinión, de las circunstancias que rodean a nuestro país en el tema educativo. El cuestionado en cuestión era yo –Obviamente- y los cuestionadores eran los altos funcionarios del ministerio de educación y más allá del infinito de mi gran imaginación.
En el ambiente cordial que me caracteriza suscitar, dialogamos con la sinceridad de los adversarios leales, ni unos insultaban la inteligencia de uno, ni uno insultaba inteligentemente a los otros. “¿Oye, profe, tú cómo ves?”.
Después de sendos caballitos de anís, que les invité -ya que cuando llegaron, de la impresión me dio mal de vientre, que no tuve más alternativa que curarme con ese licor dulce- les dije: ¡Miren!…
“Les agradezco que tomen en cuenta a este abnegado esclavo de la educación, pero con todo respeto, les guste o no, el reto… será detener la puesta en escena, es decir, la simulación de un sistema educativo a modo para una sociedad a modo”.
Jugaremos en el bosque…
“Las consecuencias negativas de no dejar la simulación, la vamos a sufrir todos, es por eso que lo mismo le diría a sus adversarios políticos, porque igualmente son mexicanos y les sugeriría también como modelo educativo algo propio de nuestra cultura mestiza, donde confluyan todos, independientemente de banderas y colores. Una base natural de unidad identitaria, contrastada y revisada”.
Mientras que el lobo no está…
“Por ahora no sucede nada grave en lo aparente. Será que jugamos a la escuelita buena, donde todos somos felices, nos enfocamos a los datos mientras que del conocimiento nos hacemos ‘patos’”.
Porque si el lobo aparece…
“A lo que podríamos transitar, sin verla venir de tanto juego, es a un colapso social por la falta de sensatez y disciplina, caracterizado por una carencia de oficio y profesionalidad, sin una ética de trabajo y mérito, ya que hoy consentimos demasiado a muchos que a futuro tendrán compromisos de pronto”.
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